La tarima flotante ya no es solo una tendencia de los últimos años, sino que se ha convertido en la opción más económica y resistente. Mayoritariamente es elegida por aquellos que se decantan por reformar el suelo de su casa. Las razones de esta predominancia son variadas. Su fácil instalación, la posibilidad de colocarla sobre un pavimento preexistente (siempre que esté correctamente nivelado) y su precio razonable hacen de la tarima flotante una de los suelos de madera más populares, sobre todo para reformas. Pero, antes de continuar, vamos a definir qué es exactamente y como instalar tarima flotante y qué tipos tarima flotante existen.
Qué es y como instalar tarima flotante
Pese a que lleva años instalándose, el concepto de tarima flotante sigue siendo tema de discusión, incluso dentro del propio sector. Lo más apropiado es decir que cuando hablamos de tarima nos referimos a un sistema de instalación en el que las lamas no van clavadas ni encoladas al subsuelo, sino que se colocan de forma flotante, separadas del anterior suelo por una capa de foam o similar, que hace las veces de aislante.
Estas características permiten colocar la tarima flotante directamente sobre su antiguo pavimento sin necesidad de realizar ningún tipo de obra o de retirarlo antes. Lo único que tendrás que hacer es nivelar el suelo y limpiarlo para una mejor instalación.
Gracias a los sistemas patentados de clic Uniclic de Quick-Step la instalación de su tarima flotante no requerirá de complicadas obras. Además, es de permitirá una fácil colocación. Asimismo, instalando tarima flotante no necesitará esperar a estrenar su nuevo suelo, sino que podrá utilizarla desde el mismo momento en que acabe de colocarla.
Tipos de tarimas flotantes
Las tarimas flotantes se caracterizan por una gran durabilidad y resistencia, pudiendo encontrar distintos modelos según sus calidades: AC3, AC4, AC5… Dependiendo del tránsito que vaya a soportar. Es por ello, que si la habitación donde estás pensando en colocarlo va a tener un gran uso y además tienes niños pequeños o mascotas en casa, lo ideal es comprar un buen suelo flotante tipo AC4 o AC5. De esta forma te asegurarás de que lo tendrás como nuevo durante muchos años.
Cuando ya tenemos claro que queremos instalar tarima y como instalar tarima flotante, es la hora de decidir que tipo de tarima vamos a elegir. En el mercado podemos encontrar dos modelos de suelo: la tarima flotante maciza, que cuenta con unos dos centímetros de grosor de madera natural, y la tarima flotante de madera multicapa sintética.
Parquet flotante multicapa de madera maciza
La tarima flotante multicapa de Quick-Step consiste en un suelo de madera procesada fabricado con hasta tres capas de madera maciza y revestido con un acabado protector. Los suelos de parquet flotante de Quick Step cuentan, debajo de la madera maciza y de la capa de acabado, con dos capas extras de pícea, pino o fibra de alta densidad que hacen que su suelo sea estable, duradero y no se arquee. Gracias a su capa de madera maciza, el suelo de tu hogar le ofrecerá un aspecto natural y una calidez y confort inigualable.
También, además de los consejos conservación y limpieza, en casos extremos, se mantiene mediante técnicas tales como el lijado y barnizado y posee una gran calidad visual.
Suelos flotantes: tarima sintética
Cuando hablamos de tarimas sintéticas, nos referimos a aquellas que están formadas por varias capas de derivados de la madera, lo que les proporciona una resistencia extra. En Quick-Step la última capa es una capa de diseño que está formada por una fotografía de alta resolución de baldosas o maderas reales que se reproduce con técnicas de impresión muy sofisticadas y a la que se le aplica un acabado con resina de melamina. Aparte de la mayor estabilidad y resistencia, incluso a la humedad, otra de las ventajas de la tarima sintética es que tiene un gran abanico de posibilidades en cuanto a diseños.
Si tiene alguna duda sobre suelos de madera o como instalar tarima flotante, no dude en contactar con Quick Step Barcelona, estaremos encantados de asesorarle.